De pasta sobrante del día anterior se pueden hacer muchos platillos. Con un poco que queso cheddar recién rallado, leche, harina, huevo y pan rallado es posible realizar unas deliciosas y crujientes bolistas súper suaves con un interior sorpresa de macarrones en queso fundido. Toda una delicia al paladar perfecta para los días en los que sobra la comida.
Ingredientes
1 caja de macarrones
400gr de queso cheddar
1 1/4 taza de leche
1/2 taza de harina
1/4 taza de mantequilla
2 Huevos
3 tazas de pan rallado
Sal y pimienta al gusto
Aceite Vegetal
Preparación
En una olla con agua poner a hervir los macarrones hasta que estén tiernos, escurrir y reservar. Rallar el queso y reservar.
En una sartén grande, derretir la mantequilla a fuego medio. Agregar esta mezcla harina y la leche. Mezclar hasta obtener una consistencia espesa. Integrar con un batidor el queso cheddar, por último agregarle los macarrones a la mezcla. Sazonar con sal y pimienta.
Esperar por lo menos una hora para comenzar a freír. Al pasar ese tiempo hacer unas pequeñas bolas. Pasar por una mezcla de huevo batido y luego por pan rallado. Freír en un sartén hasta que estén doradas por ambos lados. Escurrir en un papel absorbente.
Fuente y fotografía: Cocina y vino